Platos sabrosos y nutritivos sin encender la cocina.
Prepara comidas rápidas sin cocinas. Ahora ya no necesitas ser un experto en la cocina para que disfrutes comiendo algo delicioso. Te recomendamos algunos platillos que te harán ver como un master chef, sin complicarte la vida.
- Ensaladas
Olvídate de la aburrida ensalada con unas tristes hojas de lechuga, un tomate deprimido y media zanahoria. Hoy en día existen múltiples maneras de preparar una ensalada apetitosa y equilibrada. Se pueden elaborar con arroz, con legumbres o con cuscús. Se les pueden añadir trocitos de pollo asado, pavo al horno, atún u otros tipos de pescado. También frutas y pan tostado. Si sabes combinar bien los ingredientes puede ser incluso un plato único. ¡Aprovechas los restos de tu nevera y usa la imaginación!
- Bocadillos
¿Qué tal un bocadillo de pan de cereales con salmón ahumado, aguacate y pepino con crema de queso? ¿O una fajita con lonchas de pavo, espinacas y queso bajo en grasa? ¿Y pan de pita rellena de atún en conserva, pimientos, tomates troceados y maíz? Las combinaciones son muchas y la diversidad puede ser muy amplia para conseguir un bocadillo nutritivo. Además es una opción práctica, rápida y divertida. Si además lo complementas con un postre a base de fruta o lácteos, el menú puede ser muy correcto. Por supuesto comer cada día un bocadillo como comida principal no es recomendable.
- Tapas
Una ensaladilla rusa con huevo y atún puede sacarte de un apuro. También unos trocitos de verduras troceadas con aceite de oliva o un buen salpicón. Lo importante es que la totalidad de las tapas aporten proteínas, vegetales e hidratos de carbono de forma equilibrada. Evita mayonesas y demasiados fritos.
- Conservas
Los alimentos en conserva son una buena opción para comer sin cocinar. Atún o unas sardinas enlatadas aportan proteínas y es fácil de combinar con hidratos de carbono como, por ejemplo, un bocadillo o se puede añadir perfectamente en una ensalada.
- Frutas y yogur
Ricas en vitaminas, antioxidantes y fibra, las frutas son perfectas para complementar el menú de una cena o una comida ligera. También son ideales para combinar con un lácteo, fuente de proteínas y calcio.
- Alimentos precocinados
Te pueden sacar de un apuro un día sin ganas de cocinar. Pero es aconsejable que no te acostumbres a este tipo de alimentos. Suelen ser muy calóricos y contener mucha sal. Lee las etiquetas y elige siempre la opción más adecuada.
- Frutos secos
Son alimentos muy interesantes desde el punto de vista nutricional. Además de ser ricos en proteínas y carbohidratos, aportan grasas saludables como el ácido omega 3 de origen vegetal de las nueces. Las puedes añadir a una ensalada o a tu bocadillo. Pero siempre con mesura: entre 20-25 gramos son suficientes.
- Legumbres
Prepara platos nutritivos y económicos con uno de los alimentos más saludables de la dieta mediterránea. Las legumbres son fuente de fibra, minerales, carbohidratos y antioxidantes. Las puedes adquirir ya cocidas en tu tienda habitual. Combínalas con cereales y obtendrás una buena fuente de proteínas. También son un buen acompañamiento para ensaladas y caldos.
- Aprovechar las sobras
¡Benditas neveras! No hay nada mejor que llegar un viernes al mediodía, agotada después de una jornada semanal y, por supuesto, sin ganas de cocinar y empezar a descubrir los tuppers con sobras de la semana y montarte un plato variado en tan solo unos minutos, darle un toque de microondas y comida resuelta.
Así que ya sabes, cuando no te apetezca cocinar tienes muchas alternativas, pero ten en cuenta estos consejos para hacer que sean lo más saludables posibles.